¿Vida Vampira?

Era una noche como cualquier otra mientras observaba desde mi oscuro escondite las masa de gente que venian de un lado a otro.
Aquellas vidas palpitantes producian en mi la sed prohibida de la cual no podia escapar. Bajé, deslizándome suavemente desde el tejado, hasta una la oscura esquina donde sencillamente esperaba la sombra perfecta para moverme.

Dificil es describir los instantes eternos que me golpeaban.
aquella carencia de sentido y de lógica cuando la sed de sangre te impulsa a abandonar los sentimientos.
Alli, pacificamente sumido en sus pensamientos, veía a mi victima cruzar el callejon.
Era perfecto...La vida manaba en sus ojos...su vitalidad y fuerza serian mias en un instante.
Lentamente me dirigí hacia él. Quizás volteo un par de veces al escuchar mis pasos pero seguió sin temor su rumbo.
Cuando la luz de la luna me permitió divisarlo.
Me di cuenta que era algo parecido a una imagen que alguna vez recreé.
Me atreví a hablarle...queria que se detuviera y asi ver su rostro.

-¿Tienes algo de fuego?- Pregunte mientras caminaba a su lado.
Saque un largo cigarrillo que suavemente coloque sobre mis labios. El caminó más despacio cuando escuchó mi voz.
Me dio el rostro mientras lo observé en silencio. Sus ojos almendra me miraban con malicia mientras buscaba su encendedor.

-Te daria mucho más de lo que pides si me das la oportunidad...- Contestó mientras le dirigí una sonrisa.
Acercó su encendedor mientras aspiré pesadamente el humo del cigarrillo.
Entonces, lamenté mi suerte. Hubiera sido algo fugaz o quizás no. Quizás lo hubiese amado para toda la vida.
Sólo sé que al mirarlo hallé en él la figura que siempre habitó en mis sueños.

Mi corazón se aceleró con fuerza. El leyó en mis ojos la insinuación. Se inclinó hasta mi para abrazarme.
Recuerdo que senti sus manos calidas rodearme. Una cosa más recuerdo aquella noche. Una luz encendida de una habitación,
desde allí una pequeña en pijama nos observaba. Creo que su madre cerró de golpe su ventana para no interrumpirnos.

La luna nuevamente parecia tentarme cuando iluminó su boca. Fue un beso y largo y tierno.
No eramos ya dos desconocidos. Acaricie su rostro con mis manos frias y me acerque hasta él nuevamente para besarle.
Esta vez me olvide de sus labios...El olor de sus ropas aún no lo olvido... Sentía que me ahogaba y cuando no pude contenerme más sentí
como mi boca se hinchaba y sangraba. Un dolor intenso me erizó el cuerpo. Era la bestía que despertaba hambrienta.
Los enormes y filosos dientes pedian la sangre del mortal. Cuando los hinqué en su cuello se estremeció sobre mi
al punto de que tuve que sostenerlo para no caer.
Despúes, aquel liquido rojo, viscoso y caliente corria por mi garganta.
Dejé caer su cuerpo inerte y sin vida en aquella oscura calle.
Podía ahora perderme tranquila en la noche, acobijada por las sombras y la soledad...

La vida puede ser triste para la vampireza Xeninna. Pero no para mi cuando la represento. Puedes ayudarme a continuar su mórbida historia y también ayudarme en la caceria...y ¿Por qué no? Hasta puedes ser mi victima...
Tranquilo, sólo será una pequeña mordida y formarás parte de mi familia para siempre.
Sólo has clip en el enlace para que participes, y envíame a mi e mail tus ideas y sugerencias para la continuación
de la vida sangrienta de mi amarga existencia vampira..

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